8 razones por las que amo la Navidad sin importarme lo cursi que pueda llegar a ser

1.     Las luces: ¿sabían que en Cuba no hay decoración navideña con luces y que cuando un cubano viene a México se enamora de ellas? Entonces… ¿por qué habrían de pasar desapercibidas para mi? El error común del ser humano es dejar de sorprenderse.

2.     La publicidad: el marketing que nos inunda por doquier me ayuda a contagiarme del famoso y odiado espíritu, no hay que verlo como venta, sino como magia. Recuerdo que cuando era pequeño, solía cantar con mis primos en la azotea de la abuela una canción de un comercial de Coca-Cola. Sí, así de ridículos éramos y yo, pues lo sigo siendo. La rola iba así (léase cantando): llega la alegría, llega la alegría, es fin de año, ¡Navidad! Ya llegó, Coca-Cola, siempre contigo, fa, la, la, la, la, la. La, la, la. Siempre Coca-Cola, siempre contigo. Espero que sí lo hayan leído cantando.

3.    El árbol: tanto me gusta el árbol en las casas y las calles, que hasta lo dejaría todo el año prendido. Por eso y porque da hueva quitarlo. Y porque se supone que debe estar puesto hasta el día de la Candelaria: febrero 2.

4.    Las posadas: y con ellas todo lo que contiene, como el ponche de frutas, las piñatas, la cantada, que los de afuera, que los de adentro, las luces de bengala, las velas y todo eso que me está faltando.

5.    La noche buena: es buena porque está llena de vida pasada, presente e incluso futura, ahí radica la magia de la noche buena, encierra los recuerdos de los que estuvieron muchas navidades y ya murieron, los que seguimos y de los que vienen en camino. Vemos pasar navidades y nos vemos todos envejecer, es algo tan mágico que denota que estamos viviendo.

6.     Los villancicos: entiendo la postura de muchos al odiarlos, la verdad tampoco me gustan las versiones de Tatiana o infantiles, pero hay unas verdaderas joyas que valdría la pena escuchar. Versiones como las de Sinatra, Ray Charles, Louis Armstrong, Eartha Kitt, y de los más nuevos están Norah Jones y Diana Krall, me faltan muchos, pero con estos podemos disfrutar de los mejores villancicos ever.

7.     Los Reyes Magos: como la vez en la que fui niño y la noche del 5 de enero corrí a la sala donde se encontraba el árbol después de haber escuchado ruidos a conocer a los Reyes Magos y me encontré que ya no estaban, lo que sí estaba eran los regalos de mi hermano. Mi lámpara y yo regresamos a la cama sabiendo que nos habíamos portado mal.

8.     El aire amistoso: en las oficinas, las escuelas y demás lugares de repente todos nos llevamos mejor y se liman asperezas, eso bueno, ¿no?


Por estas 8 y muchas cosas más me encanta la Navidad. Este es el mejor momento para los cursis, nos tiene que tocar una vez al año, ¿no creen? Ah, y aguas, porque de por sí abrazo a medio mundo, en estas fechas abrazo al otro medio faltante.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Don Globo

La playlist de la muerte

Canciones de la muerte 2